De Whitehorse a Vancouver. 1a parte

No ha sido para nada fácil este precioso y lluvioso trayecto. Me despedí de Lucky después de que me revisara la moto completamente, me diese alojamiento, comida por dos dias y me regalara las herramientas necesarias para la moto. La primera hora de trayecto no llovió, pero luego no dejó de hacerlo. Un precioso paisaje entumecido por el dolor de unos pies mojados y enfriados a su vez por un clima, el cual, ya se me hacia insoportable. En la distancia veo una gran animal que cruza la carretera. Aminoro la velocidad, apago la moto y me pongo a su lado. Nos llueve a los dos. El me mira extrañado por mi curiosidad y yo lo miro admirado por su belleza, y quizás también, por su libertad. Sin rejas, sin un cartel que definiese su origen ni costumbres. El gran Bisonte sacudió su cuerpo quitándose el agua que le estorbaba. Pensando que yo estaba quizás demasiado cerca, me despedí de el y continúe mi ruta.

Mas adelante y pensando que había tenido mucha suerte en ver algo así, una gran manada de ellos y yo corrimos juntos y tuve la suerte de grabarlo para podér enseñaroslo en el siguiente video.

Llegue a un punto donde puedes bajar a Vancouver directamente o por las Roking montains o como se escriba que eras 300 kilómetros más y por lo visto mucho mas bonito, pero hay que recordar que las ruedas están las dos para cambiarlas. Casualmente, la ruta corta, solo se abría 15 min. en las horas impares por obras. Pues la ruta larga y que sea lo que tenga que ser. Larga pero preciosa ruta. Como sacada de un sueño, montañas con ríos, vegetación y vida animal se daban de la mano. Ciervos, ardillas, alces, oso negro y un chorro de bicho que mas de uno observe y temí junto a la carretera.

Y el dinero se acabó y se me ocurrió algo que surgió efecto. Os dejo el primer video de este trayecto. Otro de momentos y una anécdota.

 

 

 

 

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